viernes, 4 de marzo de 2011

home is wherever I'm with you.

Siempre he dicho que, de poder pedir tres deseos, el único que tengo claro es el de que la vida se convierta en un musical. Hay días que da igual lo que hagas o a quién tengas que ver, porque lo importante es la banda sonora que le pongas (y, de paso, la coreografía que te imagines y cuántos fuesgos artificiales se lancen al final de tu ensoñación) Yo hoy no he podido dejar de escuchar esta, ideal para pasear en bicicleta bajo el sol de invierno-casi primavera.



Home! Let me come home!
Home is wherever I'm with you!

No hay comentarios:

Publicar un comentario